24 oct 2011

Me Quedo o Me Voy? Es una Decision...

Es el final de un dia largo. Tienes una llamada mas que hacer, un documento mas que leer, un correo electrónico mas que enviar, un cliente mas a quien ver, una cosa mas que terminar. Una cosa mas que no puede esperar hasta el día siguiente. ¿Y porqué no?

¿Porqué no? Bueno, siempre hay razones por las cuales se tiene que hacer esa ultima cosa hoy, antes de ir a la casa. Antes de ir a una casa donde nos espera un plato de comida fría. A una casa donde los niños ya están durmiendo. A una casa donde nuestra esposa ya no nos reclama el porque llegamos tarde. A una casa donde llegamos nada mas a relajarnos un poco enfrente del televisor viendo el noticiero de la noche o algún programa mientras hacemos un poco mas de trabajo y nos preparamos para otro día de trabajo arduo. Trabajo que nos da para vivir pero que no nos deja vivir realmente.

En su articulo "Should You Stay Late or Go Home" (¿Deberías Quedarte Tarde o Ir a Casa?), el autor Ron Ashkenas afirma que si te gusta lo suficiente tu trabajo o si tu familia es comprensiva, entonces esta bien trabajar horas demás. Quizás eso sea de consuelo para algunos, pero no para la mayoría de hombres cuyos comentarios leí posteriormente al articulo. La mayoría de los comentarios eran de padres que indicaban que les gustaría llegar a casa a una hora mas razonable. Pero sin embargo, muchos sentían que no podían darse ese lujo, especialmente en esta economía mala.

En mi primera clase de economía en la universidad aprendí de Larry Wimmer que en la vida nada mas hay tres cosas que absolutamente tenemos que hacer, y que para todo lo demás, siempre hay una opción, una alternativa. Esas tres cosas son las siguientes:
  1. Tenemos que morir. Nadie se escapa de esto.
  2. Tenemos que hacer decisiones. Hasta el no decidir es una decisión.
  3. Tenemos que vivir las consecuencias de nuestras decisiones.
Asi es que, siempre tenemos una opción. Piénsalo! Podemos escoger no cerrar una venta mas. Podemos escoger no hacer una llamada mas. Podemos escoger escribir ese mensaje mañana. Podemos escoger terminar la presentación por la mañana. ¿Y porqué no? Esa es la pregunta. ¿Es porque queremos impresionar a los jefes? ¿Es porque queremos vernos bien a la hora de que se nos evalúe el rendimiento? ¿Es porque queremos ese bono? En realidad, ¿porqué no?

La verdadera pregunta no es si podemos darnos el lujo de no trabajar mas tiempo. La pregunta es si podemos darnos el lujo de vivir con las consecuencias.

Mi esposa tiene en casa un cuadro que dice "Al final de cuentas, no importará qué tan grande casa tuviste, o cuánto dinero ganaste, o qué tipo de carro manejaste. Lo que importará es si hiciste alguna diferencia en la vida de un niño."

Entonces, escojamos hacer una diferencia.

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